La pasión por el surf y por la conservación de la creación, ha movido a esta organización cristiana a dedicar una mañana a la recogida de desperdicios en la playa de la Barceloneta. El 26 de marzo, coincidiendo con el inicio de la primavera, estos chicos y chicas se armaron con guantes, bolsas y botellas de plástico para poner su granito de arena por el bien de la naturaleza, y para seguir disfrutando de un mar limpio en el que surfear, afirman.
En el mundo se producen al año más de 100 millones de toneladas de plásticos, del cual un 10 % acaban en el mar. Losambientes marinos son incapaces de digerir tanta basura, cuyo reciclaje natural necesita decenas de años para lograrlo. Un tiempo durante el cual botellas, envoltorios y toda clase de desperdicios flotan libres, convirtiendo la superficie marina en una sopa de residuos. El problema no es tan sólo estético. Más de un millón de aves y cien mil mamíferos marinos y tortugas mueren cada año al ingerirlo accidentalmente o enredarse en él. (Fuente: ProtestanteDigital.com)
Esta no es la primera ocasión en que Surfrider Barcelona lleva a cabo este tipo de acción, y Christian Surfers de Catalunya, se ha comprometido para seguir haciéndolo juntos en próximas oportunidades.
Revista Kerygma - FADE 